La historia del Estadio Centenario
Si bien el 18 de julio de 1930 fue la fecha "oficial" de la inauguración del Estadio Centenario la historia marca que en realidad fue el 18 de mayo de 1929 cuando el coloso de cemento comenzó a ser realidad. En esa fecha, el Congreso de FIFA designó a Montevideo como sede del primer Mundial de fútbol ya que las gestas de Colombes y Amsterdam habían hecho inclinar la balanza hacia Sudamérica ante la competencia de España e Italia que querían para Europa la distinción. La condicionante era que la delegación uruguaya se comprometía a construir un estadio acorde a la circunstancias que por esos días no tenía... ni soñaba.
En apenas un año se tenía que construir.
Haciendo historia
Lo que es hoy el Parque Batlle, en la década del 20 era el Parque Pereira. Allí emplazado en el sector donde hoy se encuentra la pista de Atletismo se había construido en 1917 una cancha de fútbol con palco para autoridades y tribunas con tablones y taludes. Ese era nuestro "field oficial" porque allí se disputó el primer Sudamericano de fútbol.
Con el fin de la Primera Guerra Mundial, el Parque ya era "de los Aliados" y en 1923 se comenzó a elaborar un proyecto en el que se pensaba emplazar un gran centro deportivo, conjuntamente con un estadio de fútbol nuevo. Con la designación de FIFA todo volvió al tapete en 1929 y el 6 de julio de ese año nace la Comisión Administradora del Field Oficial (CAFO). Esta Comisión nace tras un acuerdo entre la Asociación Uruguaya de Fútbol y el Consejo de Administración de Montevideo. El arquitecto Juan Antonio Scasso fue designado en forma unánime como director y proyectista de las obras. Esto fue un 12 de julio.
Comienza la obra
La piedra fundamental fue colocada el 21 de julio haciendo un breve discurso César Batlle Pacheco (hijo mayor del ex presidente Batlle y Ordóñez) en nombre del Concejo de Administración y Julio Iturbide por la Asociación Uruguaya de Fútbol.
Una hondonada agreste fue el lugar elegido por Scasso para erigir la obra. Entre desmonte y remoción de tierras, nivelación, confección de planos, aprobación de los mismos, licitaciones, contratos y servicios, CAFO tuvo que realizar treinta y cinco sesiones. Una vez aprobados los pliegos de licitación para la construcción de cuatro tribunas, cada una ya tenía su nombre designado por el arquitecto. La oficial se llamaba Tribuna de Honor, a su frente estaría la Tribuna Olímpica, mientras que las otras dos, que estarán detrás de los arcos recordarán los triunfos de Amsterdam y Colombes.
La empresa Costemalle fue la que realizó el movimiento de tierra, el desmonte y los terraplenes. Preocupaba en demasía la falta de luz y agua en esa zona de Montevideo que ante la desaparición física del líder político, pasó a llamarse Parque José Batlle y Ordóñez. Intensas lluvias atrasaron la obra y la prensa comenzaba a dudar del término de las mismas en la fecha estipulada.
Para enero del 30 ya se había solucionado el problema de la luz y el agua para que las obras se aceleraran. El Concejo de Administración de Montevideo se hizo cargo de las instalaciones eléctricas al mismo tiempo que la Comisión Nacional de Educación Física vendió bonos "pro field".
Removiendo el parque
Entre febrero y julio se cavaron ciento sesenta mil metros cúbicos de tierra y se colocaron catorce mil metros cúbicos de cemento armado. Se definió que la torre que se colocará en la Olímpica tendrá cien metros de alto. Las tribunas De Honor y Olímpica fueron edificadas por la empresa Dyckerhoff y Widmann, mientras que las Colombes y Amsterdam las hizo la empresa Adolfo Shaw.
Mediante licitación, Miguel Croce proporcionó doscientos mil panes de gramilla los cuales con braseros y estufas eléctricas fueron mantenidos secos para la inauguración.
La capacidad estimada en el proyecto original del Aqto. Scasso era de 102.000 personas pero como los tiempos se acortaron y los problemas aumentaron se tuvo que reducir a un estimativo de 70.000 personas.
Como la parte más adelantada era el sector de la Tribuna Olímpica, se resolvió allí construir los vestuarios y los baños. A ambos lados de la torre estaban los sectores para locatario y visitante y para salir al campo de juego los jugadores tenían que bajar por largas escaleras de madera a la vista de todo el público presente.
El 12 de junio se resolvió denominar Tribuna América a la que hasta ese entonces era De Honor. También ese mismo día CAFO resuelve dar el nombre oficial de "Stadium Centenario" a la obra y comunica que las medidas de la cancha serán de cien metros de largo por ochenta y tres de ancho.
Un asado de festejo
Inexistentes en el proyecto inicial se resuelve realizar plateas en el sector bajo de las tribunas. Platea uruguay se llamaba la que es la América y Montevideo a la Olímpica. Cuatrocientas butacas fueron compradas a una empresa argentina que se colocarían en el Palco Oficial al tiempo que Cervecería Oriental daba un préstamo de cien sillas para el sector de los periodistas. Los obreros que participaron de esta gesta, se reunieron una tarde para comer un asado organizado por las autoridades de CAFO dentro mismo de la cancha.
Una vez comenzado el Torneo Mundial aun no se habia inaugurado oficialmente el Estadio Centenario.
La demora se debió a las continuas lluvias caídas en las semanas previas, por lo cual los primeros ocho partidos debieron jugarse en Pocitos y en Parque Central, las canchas de Peñarol y Nacional respectivamente.
Recién el día 18 de julio, a los cinco días de comenzado el torneo, se inauguró el estadio con el cemento todavía húmedo, que permitió a la gente presente ese día grabar para siempre, sus mensajes.
Incluso cuentan que mientras los jugadores pisaban los vestuarios por primera vez, los obreros sacaban las últimas bolsas de cemento.
El primer gol en este Glorioso Estadio lo marcó "El Manco" Castro a los sesenta minutos del partido que disputaron Uruguay y Perú, donde los celestes vencieron por uno a cero. En la foto que vemos aqui debajo se aprecia el preciso momento de aquel historico gol, y la foto es doblemente valiosa ya que demuestra que la pelota atraveso por completo la linea de gol, contrariando la protesta peruana de aquella epoca que reclamaba que la pelota no habia atravesado dicha linea y por ende debia anularse el gol.
La final de la Copa Mundial enfrentó a Uruguay y Argentina, con la victoria de Uruguay por 4 tantos a 2.
Desde ese entonces, “El Centenario de Montevideo” (como se le conoce popularmente), fue sede de varios torneos internacionales a nivel de selecciones de mayores, destacándose los Sudamericanos de 1942, 1956, 1967, el Mundialito de 1980, y finalmente la Copa América de 1995, siendo todos ellos ganados por Uruguay.
El 18 de julio de 1983 es declarado por la FIFA "Monumento Histórico del Fútbol Mundial", siendo la única construcción de ésta índole que ostenta ese titulo en el mundo.
En la actualidad, la Selección uruguaya de fútbol juega en este estadio sus partidos de local, al igual que cualquier equipo uruguayo que solicite disputar sus partidos en este escenario.
He Aquí una breve reseña de lo que ha sido del Gigante de Cemento.
El 2 de agosto de 1930 se denominó Tribuna Montevideo a la Olímpica. A su vez se designó Platea Olímpica a la Platea Montevideo, pero esto no prospero porque el público siempre reconoció como Olímpica a la tribuna donde está la torre de los homenajes.
El primer espectáculo nocturno se realizó el 24 de agosto del mismo año pero tuvo la particularidad de que se realizó a oscuras. ¿Cómo se explica? La Comisión Municipal de Fiestas solicitó la Tribuna Olímpica para allí realizar un festival de fuegos artificiales.
En 1931 la Federación de Boxeo y la Confederación de Atletismo utilizaron los vestuarios para concentrarse de cara al Campeonato Latinoamericano, los pugilistas y al Sudamericano los atletas.
El frente de la Tribuna América debía estar recubierto de mármol y de pórfido. Para la torre de los homenajes estaba proyectada la instalación de un ascensor y una escultura sobre la proa que apunta hacia el campo de juego.
En diciembre de 1931, CAFO decide suspender los encuentros preliminares para mantener la gramilla en buen estado. En ese mismo mes se aprobó el presupuesto de UTE para la iluminación del Estadio.
En enero de 1932 se realiza una licitación para la construcción de cuatro torres de acero. Se adjudicó a la empresa Tomás Clivio la colocación de dieciocho reflectores por cada torre.
CX 14, General Electric-El Espectador y CX 18, Difusora Colón, solicitan y obtienen la concesión del servicio de transmisión radioeléctrica con publicidad, pagando diez pesos por cada partido. El SODRE también transmitía.
Se colocaron dos mástiles, a ambos lados de la Torre de la Olímpica, con el fin de colocar las banderas de los clubes actuantes. Además, si se izaba una bandera de color rojo en lo alto de la torre era para señalar que el encuentro estaba suspendido.
A modo de tanteador se colocaban gallardetes colorados debajo de las banderas de los clubes.
El primer partido nocturno con luz eléctrica fue el 7 de diciembre de 1932 cuando jugaron Nacional y Wanderers en forma amistosa, pero antes, el 21 de noviembre un equipo de periodistas y otro de árbitros habían probado la iluminación.
El Polo Club pidió a CAFO si existía la posibilidad de jugar un encuentro del deporte de los caballos en el Centenario. La oficina técnica rechazó el pedido porque las medidas reglamentarias no estaban preparadas.
En 1933 se realiza el primer estudio de capacidad del estadio. La capacidad normal era de 61.575 espectadores y toleraba 5.799 más. Es decir 67.374 personas. ¡Nunca el Centenario, aún en estas épocas, pudo acercarse a 80.000 personas de capacidad!
En 1934 se prohibieron las transmisiones radiales porque la Liga entendía que eran la razón de la ausencia de público a los partidos. Igualmente el SODRE se las ingenió y transmitía mediante prismáticos desde lo alto del Clínicas que se estaba construyendo. Este año también se habilitó el túnel de acceso de los jugadores.
El club de Baby fútbol, Pedemonte, fue el que aportó los primeros niños alcanza pelotas en el Centenario. CAFO entendió que así se agilitaba más el juego.
El 9 de junio de 1939 se cede el Consejo Nacional de Enseñanza Primaria y Normal el entrepiso de los locales de la Tribuna Olímpica para que allí se construyera una escuela pública. Las obras culminaron a fines del año siguiente.
En la decada del 40 un nuevo estudio dio cifras de 59.287 personas como capacidad máxima del Centenario.
La dirección de Paseos Públicos de la Intendencia pide realizar un estadio municipal de bochas dentro del Centenario en 1942. Pese a que aún le quedaban 27 años de usufructo de las instalaciones, Peñarol estudió la posibilidad de instalarse allí y ubicar su sede deportivo-social.
El 2 de febrero de 1947, CAFO prohíbe la propagación de los himnos y marchas deportivas en los encuentros al recrudecer algunos signos de violencia en el fútbol.
Llega la Vuelta Ciclista al Centenario. En la semana de Turismo de 1947 y por el portón que une la América con la Amsterdam entra Atilio François en su bicicleta para ganar, frente al Palco Oficial, la dura prueba. Hasta 1954 la Vuelta terminó siempre en el Centenario.
Se adquiere al Banco de Cobranzas los tableros tanteadores que se colocan en la Tribuna Amsterdam. En julio de 1947 comienza la publicidad en los muros de todas las tribunas.
Poco despues los antiguos parlantes son cedidos al Velódromo porque se compran unos de mayor capacidad. A raíz de una queja formal de las autoridades del Clínicas se realizan unas correcciones para que el ruido no molestase a los internados.
En 1954 se resuelve volver a poner en práctica un antiguo sistema que estaba en desuso. Cada vez que se colocaba una bandera roja, con diagonal azul, era señal que el encuentro preliminar estaba suspendido.
Se pone en estudio un proyecto de obras ampliatorias que llevaba la capacidad de! Centenario a 100.000 personas. Incluía servicios públicos y privados en cada Tribuna, locales de concentración y ambientes para las delegaciones debajo de las Tribunas Amsterdam y Colombes; un gran Museo deportivo en la Olímpica y salas de recepción en la América.
74.860 personas era la capacidad del Centenario en 1955 ya con la obras de ampliación de la Amsterdam y Colombes totalmente terminadas.
En 1959 se instala un tablero indicador de los resultados de las otras canchas. Además se construyen dos filas de palco para periodistas, frente a las cabinas de transmisión.
Tras 34 años de espera, en 1964 finalmente se logra el cierre total del Centenario con 2.221 metros cuadrados de muro. Además se inauguran las oficinas de CAFO en el Estadio.
Desde 1967 comenzó a trabajar la Comisión pro Museo del Fútbol que se ubicará finalmente en la Tribuna Olímpica.
En setiembre de 1969 otro proyecto entra en estudio. Las obras comprendían: complementación de la Tribuna América, rampas y pasarelas de salida, salas de reunión, bares, confiterías, baños, boleterías, ascensores, museos, mejora de taludes. La capacidad del estadio hubiera avanzado a 90.000 personas. Además querían mejorar la iluminación, colocar butacas en el Palco oficial y ya se estudiaba colocar un sistema de riego.
En abril de 1974 se colocan arcos de hierro. Hasta ese momento se utilizaban palos de madera.
El 15 de diciembre de 1975 fue la fecha en que se inauguró el Museo del Fútbol.
Fabricados en Institutos penales y con relojería brasileña el 2 de agosto de 1976 se estrenan los molinetes en las puertas de acceso.
A mediados de 1978 se elimina la cancha de básquetbol que aún estaba en la Platea Olímpica y se aprueba un plan de obras de remodelación para que en todos los taludes la gente estuviera cómodamente sentada.
A principios de la decada de los '80 se aumenta casi cuatro veces más la potencia de la iluminación total del Estadio, se nivela el piso y se coloca un nuevo sistema de riego.
En esa misma epoca se acondiciona y moderniza la parte central de la Platea América. Se cambia el tablero electrónico de la Colombes.
En la decada de los '90 se eliminan los taludes Amsterdam y Colombes luego de algunos hechos de violencia. Los bancos de hormigón que allí estaban, son retirados.
Una obra de reestructuración hace que desde el Palco oficial se pueda bajar hacia los vestuarios, y se realizan distintas obras de saneamiento del campo de juego.
Por primera vez son vendidos los palcos en los que se incluye aire acondicionado, asientos, televisión, heladera y todas las comodidades imaginables, y las cabinas de transmisión son llevadas al Palco Alto.
En el nuevo milenio se coloca en el 80% de las tribunas asientos de plástico que embellecen y modernizan la vista general del Centenario.
Se vuelve a autorizar el ingreso de público a los taludes, y la torre de los homenajes recibe varios arreglos en su parte baja.
El 23 de agosto del 2005 una poderosa tormenta azota el Uruguay y por tal motivo colapsa el tablero electrónico, no habiendo ninguno por el lapso de mas de tres años.
El 17 de Octubre de 2008 se presenta el nuevo tablero digital de última generación del Estadio Centenario que esta en la Tribuna Colombes del máximo escenario futbolístico y fue donado por el gobierno venezolano a la Asociación Uruguaya de Fútbol, tras ingentes esfuerzos del gobierno de la AUF y el presidente de la República.
No comments:
Post a Comment